El día que me quieras

Una noche con lluvia, escondido en mi sótano mientras suena El día que me quieras, escuchando de ambiente cómo personas se matan afuera de mi casa, se matan a puño limpio, sin armas de fuego, sin armas blancas, sin trampas... ni siquiera escucho gritos de dolor, solo de odio, pues estoy seguro que ellos saben lo que hacen, y en este caso... sobrevivirá el más fuerte ya que a ninguno le queda una pizca de humanidad. Estoy escondido en mi sótano, esperando a que alguna de esas bestias guiada por su sed de odio llegue a localizar mi calor humano, y me haga añicos como si fuese una hoja papel creado a partir de otros papeles ya usados, pero la verdad es que no tengo miedo, porque acepté mi destino en usar estos minutos de vida para entender y escapar de mi sufrimiento, ese sufrimiento que he cargado por siglos y me ha quemado hasta llegar y destruir toda mi hipodermis, dejando así a la vista mi formación biológica, demostrando que siempre he sido un ser vivo.   

Ahí estoy yo, esperando a que esa bestia me encuentre y se decepcione al enterarse que durante estos siglos, quien le ha ganado en destruirme ha sido alguien que en los últimos minutos lleva escuchando El día que me quieras