Mi brazo izquierdo

Un hilo blanco se enreda en mi brazo, me asfixia al igual que esa serpiente en mi garganta, la veía tan desesperada que me apretaba con una fuerza descomunal, como si quisiera que me enterara de algo, ¿Qué quieres decirme? No importa lo que sea, hazlo rápido que terminaré muerto sobre tu cuerpo y no podrás escapar de la culpa. Sé que no puedes hablar pero... ¿Acaso esa es tú única forma de comunicarte? Me lastimas, no logro entenderte y me hace angustiar, porque no veo en ti maldad, solo veo un hilo blanco que enraíza mi brazo derecho evitando así poder abrir la muñeca, ¿Es eso lo que buscas? ¿No quieres que use esa mano? No puedo decírtelo, me asfixias tan fuerte que no me sale la voz. Te quiero y nunca te enteraste de eso. 

Perdóname. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

El día que me quieras

Muy sensible